Como hijo de funcionario, Yoshida Kenkô (1283-1350), cuyo nombre original era Urabe Kaneyoshi, comenzó una prometedora carrera en la corte del emperador Go-Nijô (1285-1308). Todo parecía augurarle un brillante futuro, mas algo motivó que, cuando contaba alrededor de 30 años, se retirara de la vida pública, tomara los hábitos y adoptara una vida de eremita. La razón de este cambio repentino se desconoce, aunque se especula con que el desencadenante de este punto de inflexión en la vida de Kenkô fuera un desengaño amoroso o rencillas políticas. Sea cual fuera la razón que condujera a Kenkô a imprimir un cambio tan radical en su vida, el resultado de su renuncia al mundo es la obra que nos ocupa, Pensamientos al vuelo (Tsurezuregusa), clásico atemporal escrito en torno a 1330-1332 y que Errata Naturae, como es habitual, nos trae en una preciosa edición, cuidada hasta el mínimo detalle.
No conozco una satisfacción comparable a la de sentarse junto a una vela, desenrollar un manuscrito y entablar amistad con personas antiguas a las que nunca he visto ni conocido.
El título de Pensamientos al vuelo hace honor a la concepción de la obra, una heterogénea y atípica antología de pasajes que inevitablemente despierta la curiosidad del lector, pues está compuesta por 243 escritos de muy diversa extensión —desde apenas unas líneas hasta varias páginas— y variadísima temática, impregnada en numerosas ocasiones de un halo melancólico que recuerda al lector la transitoriedad de la existencia: curiosidades de la época y las gentes; ideas vagas y dispersas que asoman a la mente del autor de manera imprevista; tradiciones de antaño; pensamientos fugaces y profundas reflexiones, tanto personales como filosóficas; chismes callejeros y anécdotas que despiertan la hilaridad y nos sorprenden con la sonrisa en los labios; crítica social o comentarios subjetivos sobre un sinfín de asuntos y personajes; alusiones a la naturaleza circundante; franco elogio de la amistad sincera…
La luna crece solo para volver a menguar. Las cosas, cuando llegan a su máximo esplendor, fenecen. Y siempre será verdad que a todo lo que llega a su culmen le espera la ruina.
Nos hallamos, pues, ante una singular recopilación sin hilo conductor definido, en la que sus breves ensayos buscan perpetuar la fugacidad de los pensamientos de Kenkô, que vuelca en estos textos todo lo que se cruza por su mente despierta, tal como reconoce en la confesión que precede a tan singular colección: “En medio del ocio, en este océano de paz, paso los días inclinado en el tintero, tratando de recoger en el papel las descabelladas ocurrencias que cruzan por mi mente. Yo mismo me he quedado sorprendido de tantos desatinos”.
No obstante, pese a lo que se pueda inferir de las palabras de Kenkô, Pensamientos al vuelo es una obra que invita a una lectura lenta, pausada, que permita saborear hasta la última hebra del espíritu que el autor insufló en sus reflexiones. No cuesta ningún esfuerzo imaginarse al ermitaño Kenkô con pincel ligero recorrer con rápidos trazos el papel frente a él para inmortalizar un pensamiento que cruza repentino su mente o, pausado, perder su mirada en la lejanía, en busca de la palabra exacta deseada o rememorando momentos vividos. Y, así, un velo se rasga y nos permite viajar al pasado, a un lugar y una época en la que el tiempo transcurría con lentitud y se medía por los cambios estacionales, a la serenidad del recogimiento del eremita que permite posar la atención en los nimios detalles que, al sumarse, configuran la existencia humana.
Autor: Yoshida Kenkô
Editorial: Errata Naturae
Año: 2019
Formato: Papel