El tachi es la espada antecesora de la katana, utilizada en los inicios de la época samurái. Significó un punto de inflexión en la manera de entender el arte marcial japonés, donde empezó a adquirir algunas de sus características más identificables.
Ver artículo: Armamento samurai
Tachi (太刀) proviene de tachikiru, que significa «para cortar». Su pronunciación es análoga a la de la espada china, por lo que también se puede decir «gran espada». Nacida como una evolución del jokoto, una espada recta previa al siglo XI, el tachi ofrece una mejor práctica y consolida una estética de la espada que se conserva hasta hoy, pese a que actualmente la asociemos exclusivamente a la katana. La curvatura de la hoja permite un movimiento más fluido tras realizar un corte, facilitando también la incisión.
Se considera que el tachi comenzó a aparecer alrededor del periodo Heian, consolidándose en el inicio del Kamakura. Como de costumbre en la historia japonesa militar, la fabricación y herrería de espadas comenzó a ganar en sofisticación, y así fueron apareciendo las primeras escuelas de herreros con prestigio, que imprimían las primeras muestras de detalle y ornamentos simples en las distintas partes de la hoja. Durante todo este periodo se crearía la tendencia de aumentar la longitud del tachi, lo que derivó en la fabricación de nodachi.
De manera circunstancialmente caracterísica de este tipo de espada, se puede apreciar cómo la curva de la hoja se fue desplazando desde cerca de la punta hasta cerca de la empuñadura. Es cierto, además, que se representa a menudo el tachi con una curvatura más exagerada. Como es lógico, las diferencias entre tachi, nodachi y katana no eran tan extremas como hoy en día se señala por motivos meramente clasificatorios.
Ahora llega la pregunta clave: ¿cómo se evoluciona del tachi a la katana -por aquel entonces denominada uchigatana- que conocemos hoy en día? Esta transformación, en el siglo XV, nace principalmente del modo de uso que los guerreros desarrollaron con los años. El tachi se envaina con el filo hacia abajo; de esta manera, es necesario desenvainarlo y efectuar un corte en dos tiempos, puesto que el espadachín necesita orientar la hoja -habitualmente con las dos manos- para esgrimirla adecuadamente. La katana, en su lugar, se envaina con el filo hacia arriba, lo que permite desenvainar y cortar en un instante. Esta es la principal diferencia entre un tachi y una katana, identificada por la firma del artesano en el mango, situada en lados opuestos.
Fuentes:
The connoisseur’s Book of Japanese Swords. Kokan Nagayama
Katana: The Samurai Sword. Stephen Turnbull
The Encyclopedia of the Sword. Nick Evangelista
2 ideas sobre “Armas samurai: Tachi”
Hola, gracias por el artículo.
Pese a que Kokan como fuente es excepcional, me gustaría matizar algunas pequeñas incorrecciones del texto.
1. No considero adecuado decir que las espadas rectas Jokoto son «pre-samurái» puesto que como bien indicáis, los samurái nacen el el Periodo Heian, y las espadas de tipología Jokoto se extienden hasta el 987 apox. por lo que ya existían samurái que las utilizaban. De hecho, Sakanoue no Tamuramaro, uno de los más famosos samurái del Periodo Heian, y uno de los primeros en recibir el título de Seitai Shôgun, usaba un «tachi» que en realidad era un chôkutô o espada recta del periodo Jokoto y que se sigue conservando hoy en día.
2. Como bien indicáis en otro de vuestros artículos, el término nôdachi no siempre hace referencia a los tachi de gran tamaño que surgieron durante el periodo Nambokuchô, siendo más correcto hablar de ôdachi (aunque se puede matizar que es popularmente conocido como nôdachi).
3. La posición y la curvatura del tachi en absoluto la hacían un arma inútil para técnicas de battô, lo que ocurre es que en esa época el battô no era en absoluto una práctica habitual, como tampoco lo era el kenjutsu (tal y como lo entendemos hoy en día). La posición del tachi tenía más que ver con el combate a caballo que con las posibles técnicas de desenvainado. Hay que tener en cuenta que las prácticas de battô no empezaron a ser populares hasta mediados/finales del siglo XVI.
Muchísimas gracias por tu respuesta, Marcos. Paso a comentarte mis impresiones.
1. Es interesante la apreciación. En general he encontrado «poca» unanimidad respecto a dichas terminologías y fechas, por lo que lo que habría que fijar primero cuándo se considera el «inicio» de la época samurái. Yo personalmente tomo el que señala López-Vera en su libro (principios del siglo XI), con lo cual la terminología sería correcta. De todas maneras, como digo, comprendo también tu punto de vista.
2. Estoy de acuerdo en ese punto como te imaginas. Es una pena que haya este conflicto de términos.
3. No tenía mucha certeza sobre este punto (quizá por haberlo sacado del libro de Turnbull), así que es probable que modifique el artículo para añadir ese matiz. Me podrías decir si conoces alguna bibliografía en la que encontrar ese dato?
Un saludo!